La Argentina tendrá cada vez más villas miseria”Robert Kiyosaki, autor del best seller «Padre rico, padre pobre», de visita en el país, dijo ayer en una conferencia de prensa: «La Argentina es un país muy rico, pero sin educación financiera, va a tener cada vez más villas miseria».
Kiyosaki es un empresario hawaiano de ascendencia japonesa, que después de desempeñarse como piloto en la Guerra de Vietnam, y trabajar como vendedor en Xerox, realizó diversas inversiones que le permitieron retirarse en 1994. Desde ese momento, y con la publicación de sus libros de autoayuda financiera, se posicionó como un gurú de los negocios y viaja por el mundo dando charlas en las que promete entregar la fórmula para volverse rico. Sus controversiales afirmaciones, como la ineficiencia de la educación universitaria y del trabajo para lograr una independencia económica, le han traído tanto seguidores, que llenan teatros en todo el mundo, como enemigos, que critican sus contradicciones y falta de conocimiento económico.
Aspectos salientes
A continuación, los aspectos más importantes de su discurso:
# La crisis nos muestra lo necesaria que es la educación financiera para aprender cómo usar la deuda. Sin crédito no hay crecimiento, pero hay que saber diferenciar entre la deuda buena y la mala.
# Mi libro «Padre rico, padre pobre» trata sobre mis dos padres. El biológico, un hombre muy educado, con un doctorado en enseñanza superior y jefe del sistema educativo de Hawaii, que a pesar de tener un muy buen sueldo murió empobrecido. El otro era el padre de mi mejor amigo, que a pesar de no tener ningún título, se convirtió en uno de los hombres más ricos de Hawaii.
# La mayoría de las personas recurren a un trabajo porque creen que de esa manera tendrán un ingreso para constituir su capital. Pero no es el empleo lo que les dará el capital, sino la educación financiera la que les dará las herramientas para conseguir ese capital. Mi padre pobre decía: «Tenés que ir al colegio para conseguir un buen trabajo», mientras que mi padre rico decía: «Si querés ser rico, nunca consigas un trabajo».
# La gente me dice que invertir en bienes raíces es complicado en la Argentina. Pero créanme que todas las personas que han construido los edificios de esta ciudad se han convertido en personas muy ricas. Siempre hay crédito disponible, hay que saber cómo conseguirlo y la respuesta es: la educación financiera. Hay que saber cómo hablarles a los inversores y detectar qué es lo que quieren.
# La Argentina es un país muy rico, pero sin educación financiera, va a tener cada vez más villas miseria. Hoy en Estados Unidos la clase media se está empobreciendo y pronto vamos tener asentamientos iguales a los que hay acá.
# Son momentos muy duros; sin embargo, personas como yo nos estamos enriqueciendo, porque hay gente dispuesta a prestarnos dinero. Yo descubrí dónde está el dinero y quién está dispuesto a prestarlo.
# No se puede enseñar a una persona pobre o de clase media a ser rica. Sólo se les puede enseñar a aquellas personas que quieren ser ricas. Una persona pobre siempre va a decir: «No puedo hacerlo»; entonces, es pobre mental y espiritualmente.
# En los próximos cinco años, EE.UU. va a ser un país muy pobre, porque hay mucha gente de la que el Estado debe hacerse cargo. En la década del 30, el Gobierno estadounidense hizo lo mismo que hizo el argentino: nacionalizó los fondos previsionales. El Gobierno de EE.UU. terminó gastando todo ese dinero, me imagino que su Gobierno está haciendo lo mismo.
# Obama es un buen hombre, pero nunca tuvo un trabajo, ni dirigió una compañía. Es producto de un sistema oficial de bienestar social que cree que hay que darle dinero a la gente. Pero lo que hay que hacer no es dar dinero, sino las herramientas para conseguirlo.
# Creo que la Argentina tiene mayores posibilidades de convertirse en un país rico si se implementa rápidamente la educación financiera en las escuelas. Pero mientras el Gobierno siga entregando dinero van a tener más villas miseria y más violencia.
# Si les decimos a los jóvenes que hay que ir a la universidad, no se van a convertir en emprendedores, sino en empleados. Obama planea un aumento en materia tributaria del 57% y eso va a hacer desaparecer los empleos.
# Ahorrar dólares es ahorrar deuda. Mi consejo es el siguiente: no hay que ahorrar pesos ni dólares, hay que comprar plata y oro. La plata es la mejor inversión mientras Obama esté imprimiendo dinero, y en la Argentina hay mucha plata. El oro se está acaparando, mientras la plata se consume en las tecnologías. La plata hoy es muy accesible, cuesta u$s 15 la onza. Según mis cálculos, en 10 años va a valer u$s 1.000 la onza.
En Cronista Comercial:
Kiyosaki: “La Argentina puede terminar como el Imperio Romano”
El gurú de las finanzas personales, y autor de bestsellers, asegura que la crisis financiera global empeorará. Recomendó comprar metales y criticó a Obama y a Cristina.
Atención a los seguidores de las enseñanzas de Robert Kiyosaki, autor de la famosa serie de libros Padre rico, Padre pobre que vendió 30 millones de ejemplares en todo el mundo y más de 300 mil en la Argentina. El gurú de las finanzas personales vino por primera vez a Buenos Aires y dejó un consejo: “No hay que ahorrar en pesos ni en dólares. Hay que invertir en plata, en primer lugar, y en oro”.
Ante periodistas, Kiyosaki explicó –dibujando flechas y números en una pizarra– que desde que se terminó con el patrón oro, el dólar es deuda. “Mientras el gobierno de Barack Obama imprima dinero, quienes ahorren en dólares ahorrarán solo deuda. La plata es la mejor inversión. Al oro se lo está acaparando y a la plata se la consume, se usa en dispositivos electrónicos como televisores, computadoras, celulares. Hoy la onza de plata cuesta u$s 15 y en diez años va a valer u$s 1000 porque se usa todos los días”, se animó a anticipar. Luego, aseguró que en la Argentina “hay mucha plata” y que buscará en el país oportunidades de inversión en metales.
Kiyosaki no se privó de opinar sobre temas locales. “En la Argentina, los agricultores no quieren trabajar porque trabajan para pagar impuestos. Eso fue lo que pasó en Roma y el Imperio Romano colapsó. Esto es lo que están haciendo con el campo”, opinó. También criticó la nacionalización de los fondos de pensiones: “En Estados Unidos se hizo lo mismo en la década del treinta y todos esos fondos se gastaron. No sé si su Gobierno no hará lo mismo, pero me animaría a decir que sí”.
El popular autor no vislumbra una salida a la crisis financiera global. Es más: se muestra profundamente pesimista. “La situación se pondrá peor. Los americanos no saben cómo manejarse sin crédito. Y esto tiene un coletazo en la economía global”, manifestó. Y no temió hacer arriesgadas predicciones: “En cinco años, Estados Unidos será más pobre, como un país del Tercer Mundo. Hay tanta gente pobre de la que tenemos que hacernos cargo... Obama piensa que la manera de crear empleo es dar dinero a la gente. Eso es socialismo”. Y continuó: “Primero fue una crisis de las bolsas, luego de real state, luego comercial y ahora se viene una crisis de las tarjetas de crédito”.
Kiyosaki, que mide más de un metro ochenta, vestía una combinación nada convencional: impecable traje negro a rayas rojas, una camisa también rayada y una corbata oscura con lunares rojos. Lo acompañaba su esposa Kim, una elegantísima rubia, con la que está casado hace 25 años pero que todavía lo mira embobada.
Desde el piso 20 del Hotel Emperador, Kiyosaki observaba una panorámica de la Villa 31. “En Estados Unidos vamos a empezar a ver asentamientos como este”, advirtió.
Las enseñanzas de Kiyosaki giran sobre la idea de que la educación financiera –no la educación formal– es clave para hacerse rico y salir de la trampa de ser asalariado. “No es el empleo lo que les dará capital”, dice. Sin embargo, algunas de sus teorías –como la especulación en el mercado inmobiliario– quedaron desacreditadas por la crisis financiera global.
Fuente: Diario Ámbito Financiero y Diario Cronista Comercial